jueves, 22 de agosto de 2013

Te extraño.

Extraño...

Tu aroma,
Tu forma de pensar,
Tu forma sin igual de caminar,
Tu profunda mirada,
Tu melodiosa risa,
Tu forma de protegerme de todo mal,
Tus facciones al reír,
Tus absurdas bromas,
Tu increíble imaginación,
También extraño tu cara soñolienta,
Cantándome de esa forma mi canción favorita,
Tus interminables quejas,
Tu mano con la mía,
Nuestras diferencias,
Nuestra deficiencia,
Nuestros labios danzando en un compás único,
Mis manos jugando con tu cabello.
Extraño eso, eso que éramos.


Extraño todo eso que logramos construir, todo eso que un día llegamos a ser, extraño verte sonreír, escucharte decir mil y un incoherencias, extraño la fuerza y voluntad que teníamos para salir adelante, para superar cada obstáculo, extraño tus enseñanzas, tus defectos, tus virtudes, extraño que seamos tan diferentes pero iguales a la vez, extraño transitar el mismo camino, extraño tu facilidad de liberarme de cada problema que aparecía, extraño que me distinguieras entre las demás, extraño que con un parpadeo supieras lo que me pasaba, extraño tu melodiosa voz en mí oído, extraño las horas en las que hablábamos hasta la madrugada, extraño tus llamadas y mensajes inesperados de esos que me dejaban con una gran sonrisa. Tan simple como el color del hoy, tan simple como descifrarme, así y sin camuflajes, te entrego un extraño puro y sincero.

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