miércoles, 7 de agosto de 2013

Heartbreaker.

Fue un Sábado. Fue una noche de primavera. Fue en uno de los peores momentos de mi vida en el que lo conocí a él, un poco más alto que yo, pelo castaño claro, ojos marrones y una sonrisa como ninguna. Tímido en su forma de ser, distintiva forma de caminar y hablar. Único, nada más que eso era, único.


Me acuerdo que estábamos sentados en el césped, él me agarraba la mano y me preguntaba por qué tenía una venda, sin ningún temor y con total confianza, se lo conté todo... (ahí estuvo mi error, haber confiado en él desde el primer momento) después de escucharme, me miró a los ojos y me dijo "Nunca más, por favor" a lo que respondí con un "Nunca más" y sellamos el pacto con un beso, de esos que eran únicos en su forma de ser, esos que me hacían cosquillas en el estómago y me dejaban con ganas de más. 

Los días pasaban y lo que construíamos era único, era hermoso, era inmenso en tan poco tiempo. Juro que era mi felicidad diaria, mi felicidad necesaria, esa que le hacía falta a mi vida después de haber sufrido tanto ese último tiempo. Él me dio la fuerza para seguir, me dio su apoyo y su contención. Si necesitaba algo, me escribía o me llamaba y esos pequeños detalles hacían que mi cariño hacia él crezca a pasos agigantados. Me acuerdo que a unos días después de todo eso, un amigo me mando un mensaje y me dijo que me quería ver, preocupada, porque no me dijo por qué, fui hasta el centro y ahí lo encontré, hablamos y en ningún momento lo menciono a él, tampoco esperaba que lo haga. Me llevó a caminar unas cuadras y ahí, justo cuando estaba por doblar por una esquina, apareció él y mi corazón se detuvo en seco y mi cara se encargó de demostrar mi asombro. Lo abracé y de la nada, no quedó nadie más alrededor nuestro. Nos agarramos de la mano y caminamos otro par de cuadras hasta llegar a una esquina. Él se puso enfrente mío y me dijo "Desde hace días que no puedo dejar de pensar en todo. Me gusta cuando sonreís, cuando me miras, cuando me das un beso y como sos, por eso te quería preguntar si estabas dispuesta a llegar a más porque yo sí lo estoy. Lo único que te pido es una oportunidad, una sola, para demostrarte que te puedo hacer feliz y que me importas". No puedo describir con palabras exactas como me sentí en ese momento, fue como si una ola de felicidad me arrasara. Sin dudarlo, le dije que sí, nos abrazamos y nos besamos. Todavía me acuerdo la fecha y todavía recuerdo como me sentí, como me hizo sentir.Hablábamos todos los días por horas, hasta quedarme dormida, no me cansaba de hablar con él, no me importaba gastar todo mi crédito, faltar a un montón de cosas para verlo a él. Siempre volvía con una sonrisa de oreja a oreja por él, por haber estado con él. Me acuerdo que siempre me preguntaba como me sentía y cómo la había pasado, era atento, lo que más me gusta en un chico, que sea atento, también, todas las noches me dedicaba una o dos canciones, encargándose de que me vaya a dormir con una sonrisa, jurando que mi día ya estaba hecho porque él formaba parte de mi vida. Me entregué por completo a él, le di toda mi confianza y todos mis sentimientos, "Me haces bien, no entiendo que fue lo que hice para merecer a alguien como vos" le dije un día, a lo que él respondió: "No hiciste nada, el que se tiene que preguntar eso, soy yo" y adjunto a eso, me dedicó el tema Solo para ti de Camila. No sé cómo explicar la felicidad que sentía esos días. Sentía que por primera vez en mi vida, estaba feliz, estaba contenta, satisfecha y todo lo malo había quedado atrás por un largo tiempo. Creí que lo nuestro iba a ser duradero, tomé todas sus promesas y juramentos, hasta que un día, me enteré de la peor manera lo que toda mujer, nunca se quiere enterar. En ese momento, todas nuestras promesas, juramentos, planes y felicidad, se me derrumbaron como por arte de magia en tan solo cinco segundos. Sentía como de a poco, la tristeza me volvía a llenar el amar, arrasando con todo lo que había cambiado por aquellos días. Me sentí decepcionada, usada y poco valorada... porque eso fue lo que hizo él conmigo, jugo conmigo y con mis sentimientos, nunca le importo nada de mí ni de ellos, se encargó solamente de jugar, de mantenerme a su lado y al mismo tiempo, a otras más. Me sentí la peor mierda del mundo, me sentía una basura y él me lo negaba, él se arrodillaba y me pedía que por favor no lo deje. Si hubiese sido otra, lo hubiera perdonado y quién sabe qué hubiese pasado un tiempo más adelante... porque lo quería muchísimo, como a nadie, como nunca había querido a nadie y no quería dejarlo ir fácilmente, directa y simplemente, no quería dejarlo ir. Lo necesitaba y mucho pero él solamente se encargo de hacer que la tristeza y decepción, en mi vida, aumentaran. Prometió cuidarme de todo mal, prometió nunca lastimarme y hacerme, solamente, feliz y si me hacía llorar, solamente iba a ser de felicidad, nada más que eso ¿Saben que fue lo más loco de todo eso? Que él fue el único que me lastimo tanto, que me decepciono y se encargo de tirarme a ochenta metros por debajo del nivel del mar. Que irónico que fue todo.Todo se había terminado, todo ya había llegado a su fin como todo. No quería verlo nunca más en mi vida, por más que lo quisiera como a nadie en este puto mundo, porque él había llegado con esa luz a iluminar mi vida, mis días, estaba convencida de que por él yo lo daba todo, no tenía palabras para describir todo lo que causaba en mí, era como esa persona que pintó mis días grises, en colores. Me lo daba todo en un beso, en una caricia, en un abrazo, en una sonrisa, en una mirada...

Gracias a él soy quien soy ahora, una persona más cerrada y sin confianza. Me cuesta mucho confiar en las personas y mucho más, si son hombres. Me cuesta demostrar mis sentimientos. Tengo miedo. Miedo de que me pase lo que me pasó con él, miedo de que vuelvan a jugar conmigo y me dejen caer tal como lo hizo él y la verdad, no estoy preparada ni quiero estarlo tampoco, para volver a caer, no se imaginan cuánto me costó levantarme, cuánto me costó superar esa decepción, cuánto me costó volver a creer en una persona. cómo me costó salir adelante pero lo hice, gracias al cielo, lo hice. Él es parte de mi pasado pero no descarto los días que pasamos juntos ni la enseñanza que me dejo; no confiar en nadie, porque yo confiaba en él hasta con los ojos vendados, no demostrar nunca como me siento, ya sea mal o bien más que nada, mal, no entregar ni demostrar mis sentimientos por completo... jamás, y que las cosas tienen que hacerse como deben ser, lentas y con paciencia. No va a ser fácil, nunca va a ser fácil, pero a la larga, valen la pena.



¿Cómo siguió todo con él? Después de unos meses de rencor, de odio y resentimiento, pudimos volver a hablar y hasta el día de hoy hablamos. Él me pidió perdón por todo y como no soy una mala persona, acepté sus disculpas y hoy en día, esta todo bien, por suerte. 
Sin merodeos, él fue la persona que más me marco en mi vida, que más me hizo mierda y que más me ayudo, fue quien más me enseño y quien más jugo conmigo. Fue un 50% y un 50% en mi vida y él termino siendo ese que quería ser en mi vida, "Nunca me olvides" me dijo una de las últimas veces que hablamos y así estoy segura de que va a ser. Nunca lo voy a olvidar. Fue el mal necesario en mi vida. Fue lo que necesitaba, quien todo me lo dio, quien más me hizo sufrir y quién más me marcó.

Conté esta experiencia porque un anónimo en Ask me pidió que contará en el Blog la experiencia que más me marcó, sin dudas, no fue la única que me marcó porque después de él hubieron un par de personas más, pero él fue quién más me hizo sufrir, como dije, fue un 50% y un 50%. 
¡Gracias por los momentos, por jugar y por enseñarme! Gracias a esto me di cuenta que no soy de piedra, que siento y mucho. Nunca pensé querer tanto como lo quise a él.

PD: http://www.youtube.com/watch?v=mrhcucasAlw me es inevitable escuchar esa canción y no acordarme de él. Esa canción dice solo un poco de como me sentía cuando estaba con él. Me acuerdo que cuando todo terminó, yo seguía escuchando esa canción y terminaba llorando.

PD2: Inclusive, escribí este posteo con esa canción de fondo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario